Redacción. La temporada estival y las ansiadas vacaciones son épocas de disfrute y asueto; y para que así sea, el Área de Salud y Consumo del Ayuntamiento de Bilbao ha recordado una serie de consejos de cara a pasar de un verano saludable y responsable.
Tal y como ha señalado Yolanda Díez, Concejala de Salud y Consumo, “está en nuestras manos asegurarnos aprovechar al máximo esta época del año. Unos sencillos consejos a nivel de alimentación y de consumo serán la clave”.
1.- Limitar la exposición a los rayos solares
Limitar el tiempo de exposición al sol ya que el daño que las exposiciones prolongadas producen en la piel es acumulativo. La sobreexposición continuada a los rayos ultravioleta puede producir efectos a largo plazo como envejecimiento prematuro de la piel (manchas y arrugas) e incluso cáncer de piel.
No se recomienda tomar el sol más de una hora diaria y si se va a permanecer todo el día en la playa hay que protegerse con camisetas y gorros.
2.- Utilizar cremas protectoras
Hay que utilizarlas siempre. El Factor de Protección Solar (FPS) recomendado dependerá del tipo de piel y de su respuesta al sol. La crema deberá aplicarse 30 minutos antes de iniciar la exposición solar, de forma uniforme por toda la piel. Un buen consejo es aplicarla en casa, antes de acudir a la playa o a la piscina.
Independientemente del factor de protección solar escogido o del tipo de piel, hay que repetir la aplicación de la crema cada 2 horas y también después de un baño prolongado.
En cuanto a los niños, además de la fotoprotección, se debe tener presente que los bebés de menos de 6 meses no deben exponerse al sol; hasta los 2 años deben evitarse las horas del mediodía y además no olvidarse de ofrecerles agua abundante a los pequeños.
3.- Proteger también los ojos
La vista puede ser dañada seriamente por la exposición al sol que, cuando es muy prolongada, puede producir daños de la córnea y otras lesiones más severas. Se recomienda utilizar gafas con filtros UV homologados y gorros que tengan visera de ala ancha.
4.- Resguardarse de las altas temperaturas
Habitualmente, la temperatura corporal se mantiene gracias a los mecanismos de transpiración de la piel; sin embargo, cuando la exposición a altas temperaturas es prolongada, especialmente en ambientes húmedos y en ausencia de viento, puede darse un fallo en estos mecanismos de control y producirse la insolación.
En caso de insolación, la piel estará caliente y reseca, habrá un aumento de la temperatura corporal, aumento del ritmo cardíaco, y dolor de cabeza, pudiendo incluso llegarse a una alteración del nivel de conciencia. Ante la aparición de estos síntomas, es importante solicitar asistencia médica inmediata y colocar, entre tanto, a la víctima a la sombra, con una buena ventilación de aire, cubriéndola con paños húmedos y dándole de beber si no ha perdido el conocimiento.
5.- Practicar ejercicio físico de forma moderada
Siempre es recomendable la práctica de ejercicio físico pero en esta época se deben evitar los ejercicios excesivamente vigorosos que dan lugar a un exceso de sudoración y pérdida de agua, pudiendo provocar debilidad y calambres musculares (por la pérdida de sales minerales). Si aparecen estos síntomas se debe descansar y beber agua a la que se habrá añadido una cucharadita de sal por litro.
Cuando la duración de un ejercicio sobrepasa los 60 minutos es recomendable ingerir pequeñas cantidades de agua (150 c.c.) cada 15 minutos con el fin de evitar la deshidratación. Si el agua contiene glucosa (mezclar 25 gramos de glucosa en 1 litro de agua) puede ayudar a evitar una disminución precoz de las reservas de glucógeno y a la aparición de fatiga.
6.- Prevenir los accidentes
En la playa es necesario seguir la señalización de las banderas y bañarse cerca de la línea de la costa, evitando las corrientes.
En las piscinas, las zonas más peligrosas son el perímetro alrededor de la piscina, los bordillos y zócalos, los trampolines y los escalones del fondo de la piscina. Por ello debemos tener especial cuidado con el uso de las mismas y todos los menores de edad deberán estar acompañados de un adulto dentro del recinto de la piscina.
Hay que evitar las zambullidas bruscas cuando hay mucha diferencia entre la temperatura ambiente y la del agua para evitar cortes de digestión. Es necesario adaptarse progresivamente a la temperatura del agua.
También hay que extremar la prudencia en las zambullidas desde zonas elevadas que pueden dar lugar a traumatismos graves.
Por último, no dejar nunca a una persona (menos aún si es un niño o persona mayor) en el interior de un vehículo cerrado al sol, ni tampoco animales.
7.- Viajes
Las personas que proyectan viajar a zonas en las que existe el riesgo de contagio de enfermedades transmisibles, deberán buscar un asesoramiento adecuado sobre medidas higiénicas y vacunaciones en función de la zona a visitar y circunstancias personales.
8.- Mantener una hidratación adecuada
En los meses cálidos del verano, la dieta y la actividad física pueden ayudar a mejorar el estado de salud y también a disfrutar del tiempo libre de manera más gratificante y divertida. No obstante, de cara a poder disfrutar de un verano saludable, el Área de Salud y Consumo recuerda que es necesario mantener el organismo bien hidratado.
En este contexto de ambiente caluroso, las actividades al aire libre generan una mayor necesidad de reposición de líquidos, por lo que resulta necesario ingerir más cantidad de líquidos aunque no se tenga sensación de sed; y si se practica ejercicio, antes, durante y después del mismo. El agua y los zumos a base de frutas naturales de temporada son la mejor elección para hidratarse.
Los niños y los mayores requieren un cuidado especial. En concreto, se les deberá proteger del sol y de los lugares calurosos, y facilitarles líquidos y bebidas frescas de manera frecuente.
Asimismo, los animales de compañía también precisan consumir agua de forma más abundante y es conveniente que durante las horas centrales del día puedan descansar en un espacio fresco y seco.
9.- Alimentación adecuada
El clima de la época estival trae consigo una amplia variedad de frutas y verduras que son la base ideal para llevar una dieta sana y equilibrada por su baja densidad energética, y gran contenido en agua y sustancias antioxidantes: tres piezas o más de fruta y dos o más de verduras y hortalizas al día son las cantidades recomendadas.
Las frutas son un excelente sistema de hidratación y proporcionan un elenco de vitaminas, minerales y sustancias antioxidantes que ayudan a mejorar el bronceado, así como a contrarrestar los radicales libres y la acción de los rayos ultravioleta.
Por otro lado, resulta importante mantener la cadena de frío en los alimentos sensibles al calor y manejar adecuadamente la temperatura en los alimentos cocinados o recalentados. En caso de duda, es mejor desechar cualquier alimento con sospecha de no estar en condiciones óptimas.
10.- Precaución con la contratación de viajes online
Antes de realizar la contratación, comparar precios, analizar qué servicios incluye y cuáles están excluidos, seguros y costes adicionales, consultar la política de cancelación, solicitar tanto el precio total como el precio desglosado, y conservar toda la documentación correspondiente al viaje (reserva, factura, publicidad, pólizas de seguros, etc.) mediante la cual queda acreditada la relación contractual.
Además, asegurarse de la que la web es segura (URL de la web debe comenzar por https:// y en la parte inferior de debe aparecer el símbolo del candado); identificar a la empresa con la que contrata (deben aparecer sus datos de contacto); informarse sobre la política de cancelación y los posibles gastos que conllevaría; comprobar qué servicios están o no incluidos en la oferta y los costes adicionales; en caso de alquiler de vehículos, procurar contratarlo a todo riesgo y sin franquicias; desconfiar de ofertas demasiado atractivas y económicas; aportar un teléfono o correo electrónico al objeto de que la empresa pueda comunicarle distintas cuestiones relacionadas con el viaje contratado.