La veterana chef, que ha participado en todas las ediciones del concurso en la villa adnamantina disputadas hasta la fecha, ha ganado el concurso local con su pincho ‘La vida es un carnaval’
La veterana chef del Hotel Villa de Almazán, Julia Medrano, ha vuelto a ganar el concurso de pinchos y tapas medievales que se ha celebrado en la villa adnamantina, a lo largo de dos fines de semana en torno a la celebración del carnaval.
Julia ha participado en todas las ediciones del concurso de Pinchos y Tapas Medievales que se han celebrado en Almazán -21 hasta la fecha- y es una institución de la gastronomía local.
Su creación de este año se llama ‘La vida es un carnaval’, y, a diferencia de otras anteriores, «que me cuestan una semana de dolores de cabeza y muchas pruebas previas hasta dar con la combinación apropiada», reconoce Julia, «esta de 2025, me ha salido a la primera», añade.
La cocinera ha apostado este año por una combinación de mar y huerta. Sobre una cama con una fina masa de pan y bogavante, sobrepone un bacalao al pilpil. A estos sabores del mar, les añade brotes tiernos de cebolla, una emulsión de vino, y un adorno con setas de la tierra.
Julia es una ganadora nata. Compite siempre con deportividad, pero con la ilusión de llevarse el premio. La cocinera define su creación con dos palabras: «está cojonuda». Y esto mismo es lo que le ha dicho el público que se ha acercado al Hotel Villa de Almazán a probarla en los días de concurso.
De nuevo su apuesta por el bacalao como ingrediente principal, como ya ocurriera en alguna edición anterior, le ha ido bien a la chef. «Aquí, el bacalao, gusta mucho», termina.
Julia Medrano recibía el premio de manos de Teresa Ágreda, concejala de Cultura, Patrimonio, Festejos y Deportes del Ayuntamiento de Almazán.
La cocinera, nacida en San Adrián (Navarra) pero afincada en Almazán desde hace décadas, volverá a representar a la localidad soriana por sexta vez en el Concurso Internacional de Pinchos y Tapas Medievales que organiza la Red Medieval a la que pertenece la villa adnamantina. Será la segunda edición de la final de este concurso que acogerá Almazán.
El concurso lo organiza la Red Medieval, a la que pertenece Almazán, junto a otras seis localidades españolas y portuguesa. Los ganadores de cada concurso local, participan en una final internacional, que va rotando de ciudad en ciudad. Los pinchos tienen la particularidad de que sus ingredientes deben ser precolombinos, es decir, que no se pueden utilizar aquellos que llegaron a España y Portugal después del descubrimiento de América, si bien las técnicas culinarias para elaborarlos pueden ser modernas.