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Las apps de citas generaron más de 41 millones de dólares en España en 2021, según datos de Statista. El Big Data se sitúa en el centro de la tecnología de estas aplicaciones, afinando los algoritmos para acertar sus pronósticos. Aunque las empresas cada vez son más conscientes de la importancia de salvaguardar la información personal y poseen estrategias avanzadas de ciberseguridad, también es importante que los usuarios hagan un buen uso
La tecnología está en todos los sitios, incluso a la hora de encontrar pareja. Usar apps de ligue se ha convertido en algo habitual y las empresas detrás de estas aplicaciones son muy conscientes de la importancia de salvaguardar los datos de sus usuarios. Aun así, estos deben tener claro cómo proteger su información de manera individual y qué datos deben ofrecer.
Las webs y aplicaciones para ligar se han ido multiplicando y algunas cuentan con un sistema más clásico, otras funcionan a través del famoso sistema de «match» y en otras sólo las mujeres pueden abrir conversación. España se sitúa como uno de los países que más usa este tipo de aplicaciones (12,83%), habiendo generado más de 41 millones de dólares en 2021, según datos de Statista. Además, según asegura el portal Bodas.net, 1 de cada 6 parejas que se casan en España se conocieron por internet. Los datos se obtuvieron a partir de más de 2.700 respuestas facilitadas por usuarios nacidos entre 1981 y 2010.
«Si tenemos en cuenta que muchas de estas aplicaciones tienen acceso a funcionalidades adicionales del dispositivo móvil como la cámara, la galería, el micrófono, o la localización GPS, el riesgo de sufrir un robo de datos se agrava, lo que les lleva a ser muy innovadoras en temas de ciberseguridad», explica Miguel Rego, Director del Área de Ciberseguridad de IMMUNE Technology Institute.
En cuanto al uso de los datos, el Big Data se sitúa en el centro de la tecnología afinando los algoritmos para acertar en sus pronósticos. Tinder, por ejemplo, utiliza la geolocalización como base de su funcionamiento, pues la idea es que al usuario se le muestren las personas más cercanas según sus intereses.
Estas aplicaciones emplean tecnología Big Data basada en modelos de recomendación, es decir, que a través de la información proporcionada por los usuarios, son capaces de buscar perfiles similares. Así, los perfiles que se quieran registrar tienen que incluir fotos e información personal como la edad, la nacionalidad, las aficiones o la distancia a la que se encuentran.
«La aplicación ofrece a los usuarios un conjunto de personas compatibles listadas según la deseabilidad que el algoritmo supone tendrán para nosotros. Un factor determinante es la información obtenida en los «swipes» de sus usuarios, es decir, los casos en los que decidimos conocer más sobre o interactuar con los candidatos propuestos. De esta forma el algoritmo aprende sobre nuestros gustos y preferencias a medida que utilizamos la aplicación. Hay que tener en cuenta que los «swipes», en teoría, se basan en algo más que el atractivo. Técnicamente representan una amalgama de las cualidades que una persona muestran en su perfil. Su descripción, el trabajo o los estudios de una persona, complementan con información las imágenes y fotográficas a la hora de recomendarnos un futuro «match», explica Ángel Galán, Director del Área de DataScience & Inteligencia Artificial en IMMUNE Technology Institute.
En este sentido, la relación entre el Derecho y la tecnología es cada vez más estrecha. Para proteger los datos personales es necesario seguir una serie de precauciones. Los expertos de IMMUNE Technology Institute recomiendan:
Leer bien la información aportada por la app en materia de protección de datos. Asimismo, las empresas deben ofrecer una información transparente y clara que permita al usuario entender lo que está aceptando.
Tener en cuenta los datos que se facilitan a la hora de descargar una aplicación para ligar. Para poder funcionar de manera correcta, estas aplicaciones exigen un determinado tipo de datos, y es de vital importancia que el usuario sea consciente de la información que está aportando sobre sí mismo. Sobre todo, se hace especial hincapié en la información relacionada con direcciones personales pues, aunque estas aplicaciones necesitan la ubicación del usuario para mostrarle perfiles cercanos, nunca exigen enviar la dirección exacta a ningún otro perfil.
En cuanto a la información de tipo financiera, se recomienda no revelar nunca ni números de cuenta ni tarjetas bancarias, así como cualquier otro tipo de información personal como número de DNI o de pasaporte.
También es importante intentar conectarse siempre a través de redes seguras y privadas, para evitar que la red sea intervenida y se pueda producir un robo de información ajeno a la aplicación.
Fuente Comunicae