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Las goteras son uno de los problemas más comunes al que se enfrentan los propietarios de viviendas y negocios
Pueden surgir por diversas razones, como el desgaste natural de los materiales, daños causados por el clima o problemas en la instalación inicial del tejado.
Identificar y corregir una gotera a tiempo es crucial para prevenir daños mayores en la estructura y evitar caras reparaciones a largo plazo.
En este artículo, Todo Cubiertas Fernández, empresa especializada en reparación de tejados en Gijón, habla de la crucial importancia de abordar las goteras de manera oportuna y efectiva:
Identificar la fuente de la gotera
Aunque puede parecer evidente que la mancha de agua en el techo indica el punto exacto de la filtración, en realidad, las goteras pueden ser engañosas. Es común que el lugar donde se manifiesta el daño en el techo no coincida directamente con la ubicación de la filtración inicial.
La razón detrás de esta discrepancia radica en la forma en que el agua puede moverse a lo largo de superficies inclinadas o estructuras subyacentes antes de manifestarse como una mancha visible.
Por ejemplo, el agua puede filtrarse en un punto más elevado del tejado y luego seguir un camino a lo largo de vigas, canalones o incluso cables eléctricos ocultos antes de finalmente emerger en el techo.
Por lo tanto, es aconsejable realizar una exhaustiva inspección a cargo de expertos en el sector. Esto implica no solo examinar la zona donde se evidencia la gotera, sino también explorar las áreas circundantes y superiores del tejado.
Es importante verificar cualquier indicio de humedad, manchas, decoloraciones o incluso rastros de corrosión que puedan señalar la trayectoria del agua.
Inspección del tejado o la cubierta
En dicha inspección se deben revisar las tejas, las juntas y cualquier área donde se sospeche que podría haber una abertura. Además, se debe prestar especial atención a las áreas cercanas a chimeneas, tragaluces y canalones, ya que son lugares típicos de incidencias.
Es importante prestar atención a signos de daño como grietas, desprendimientos, abolladuras o tejas desplazadas. Incluso pequeñas imperfecciones pueden permitir la filtración de agua, por lo que ninguna anomalía debe ser pasada por alto.
Reparación de tejas o materiales estropeados
Al detectar una teja dañada o material de cubierta en mal estado, es fundamental reemplazarlo. Esto puede hacerse de manera localizada sin tener que rehacer toda la superficie.
Los materiales de reemplazo deben ser compatibles y del mismo tipo que los existentes para garantizar un sellado adecuado.
Sellado de juntas y grietas
Las filtraciones, en numerosas ocasiones, tienen su origen en juntas o grietas en el tejado o en zonas adyacentes, como las conexiones de tuberías o las chimeneas. Es de vital importancia aplicar selladores específicos que establezcan una barrera impermeable efectiva.
Aplicación de recubrimientos impermeables
Los recubrimientos impermeables son una gran solución para prevenir futuras goteras. Estos productos crean una capa protectora sobre la superficie del tejado, proporcionando una barrera adicional contra la humedad y los elementos.
Algunos ejemplos comunes de productos impermeabilizantes para tejados incluyen:
Pinturas impermeabilizantes
Membranas líquidas
Impermeabilizantes asfálticos
Productos de silicona líquida
Caucho líquido
Selladores de juntas y grietas.
Limpieza y reparación de canalones
Los canalones si están en mal estado o mal instalados, se pueden convertir en una fuente de filtraciones, así como daños en el tejado y la edificación en general.
Por ello, se debe llevar a cabo una evaluación periódica para identificar posibles problemas como acumulación de residuos, juntas sueltas o corroídas y secciones dañadas.
La limpieza regular es esencial para evitar obstrucciones que impidan el flujo adecuado del agua. Además, es importante asegurarse de que los canalones estén instalados correctamente para facilitar un drenaje eficiente.
Revisión de la ventilación y aislamiento
La ventilación adecuada es esencial para mantener un equilibrio entre la temperatura y la humedad en el tejado. Los problemas de ventilación pueden contribuir a la formación de condensación y humedad, lo cual puede ser una fuente de goteras.
Por lo tanto, es esencial asegurarse de que el espacio del tejado esté bien ventilado para permitir una circulación adecuada del aire.
Por otro lado, el correcto aislamiento es fundamental para mantener una temperatura estable en el interior y prevenir la condensación. Si el aislamiento está deteriorado o mal instalado, puede provocar la acumulación de humedad en el tejado, lo que a su vez puede contribuir a la formación de goteras.
Prevención de la condensación
La condensación puede ocurrir cuando el aire húmedo en el espacio del tejado entra en contacto con superficies más frías, como el revestimiento interior del tejado. Esto puede llevar a la acumulación de agua y eventualmente a la formación de goteras.
Un aislamiento adecuado ayuda a prevenir este problema al mantener una barrera entre el aire cálido y húmedo y las superficies frías.
En casos de goteras, es recomendable contar con la experiencia de una empresa profesionales en reparación de tejados. Estos expertos realizarán las inspecciones necesarias para ofrecer soluciones específicas para el problema que presenta un tejado.
Fuente Comunicae