LIBE MIMENZA CASTILLO – BBN
La entrenadora de triatlón lemoiztarra Aitziber Santos Garrastazu lanzó el reto The Iron Girl Project mediante su blog el pasado mes de diciembre. Buscaba chicas que no hicieran deporte o que tuvieran muy poca experiencia deportiva. “Con poco tiempo para entrenar por las obligaciones de los niños pequeños y el trabajo, chicas que tuvieran miedo a la bici, que no se valoraran y pensaran que nunca serían capaces de conseguir algo así, que no supieran nadar bien…”, pero con ganas de superar las limitaciones y afrontar el reto de completar el Triatlón de la Mujer de Donostia que se celebra todos los años el último fin de semana de Junio.
20 mujeres lideradas por Aitziber
Aitziber Santos Garrastazu es entrenadora de Triatlón de Nivel I; el único nivel que acredita, de momento, la Federación Vasca de Triatlón. Aunque atesore una desarrollada experiencia deportiva ella misma remarca que siempre ha sido una mala nadadora, cualidad que no le ha frenado a la hora de realizar incluso travesías; y es que le “da mucha rabia, porque sobre todo las mujeres somos las que pecamos de no intentarlo; a las chicas siempre hay que empujarlas más y nos cuesta más fomentar y motivar”. Tesón le sobra, una breve charla con Aitziber nos llena de energía, optimismo y ganas de soltar todos los frenos y acelerar con determinación camino a nuestras metas.
La respuesta al reto lanzado por Aitziber en la red fue inmediata: “Ante mi grata sorpresa, al día siguiente abría una lista de espera porque el número de mujeres que se interesó por el proyecto fue enorme”. Su objetivo inicial era juntar a 15 chicas, pero al final, serán en total 20 mujeres las que formarán el equipo de The Iron Girl Project. “Más de 20 es imposible, pero buscaré otras maneras para que las chicas que han quedado fuera puedan participar. Probablemente les invitaré a las quedadas mensuales, a apoyar el proyecto con la recaudación… abriré caminos para que se puedan integrar”.
Todas las integrantes tienen sus propias historias de superación: “Me contaron en sus e-mails cosas como que le tenían pánico al agua, que no sabían si serían capaces, que no se atrevían a andar en bici por la calle, que desde que han dado a luz no han vuelto a hacer deporte, que en la vida han practicado ningún deporte, que creen que el triatlón es demasiado para ellas… me di cuenta que todas ellas necesitaban un proyecto así”.
La iniciativa The Iron Girl Project empezó a gestarse hace un año, pero después de dar vueltas por la inquieta mente de la impulsora terminó en un cajón: “Debido al miedo de lanzar un proyecto de estos en solitario, aunque ya tuviera el nombre y todo, lo dejé. Pero este año me he decidido porque tengo que ser yo la primera en superar el miedo que nos paraliza”. La idea del reto le surgió al leer el libro de Iolanda López Iglesias, “Femenino sin límites”, en el que la autora catalana cuenta cómo hizo de su primera maratón un proyecto solidario. Esa es la idea de The Iron Girl Project, es decir, acumular la ayuda de muchas personas, asociaciones y empresas entorno al reto, con la intención de apoyar una buena causa.
Solidaridad con la lucha contra el cáncer de mama
Al igual que en la disciplina del triatlón, este proyecto se nutre de tres objetivos. Nadarán en aras de fomentar el deporte femenino, pedalearán con el fin de contribuir a la asociación ULEM y, por último, correrán para motivar a la gente a esforzarse por conseguir sus retos y sueños y que el miedo al fracaso no las deje por el camino.
Para Aitziber es crucial, aún hoy en día, fomentar el deporte femenino, “porque en cualquier carrera que no sea la de la mujer solamente el 10-15% de las participantes son chicas; por supuesto, todavía menos en triatlón. Se necesita un empujón ya que a pesar de que en los últimos tiempos se están animando mucho las mujeres, hace falta que nos lo creamos”.
Por otro lado, el reto The Iron Girl Project, contribuirá mediante la recaudación a la asociación Un Lazo en Movimiento (ULEM) en su lucha contra el cáncer de mama. La elección de la asociación mallorquina fue motivada por un lazo de amistad en el que el embajador del proyecto, Edu Zapata, le contó su labor a Aitziber y a ella le encantó la idea, aún así le “da pena no hacer algo con una asociación local”, colaboración que no descarta cara al futuro. La recaudación de fondos se llevará acabo mediante la publicación de publicidad en el blog, patrocinios, sorteos con aportaciones para la asociación y la compra, a cambio de 10 euros, de la camiseta solidaria que todas las chicas de The Iron Girl Project lucirán, tanto en los entrenamientos, como el día de la prueba.
El tercer pilar del proyecto pretende motivar a la gente transmitiendo el mensaje de que mediante el esfuerzo se alcanzan las metas. Dice Aitziber que este es “un mensaje muy importante en la vida en general, porque muchas veces nos quedamos sin hacer lo que realmente queremos precisamente por ello; por no intentarlo, por no trabajarlo”.
Seis meses para preparar una triatlón
Las integrantes del reto The Iron Girl Project iniciaron su aventura el pasado 25 de enero. Rumbo a la meta del triatlón de la mujer, en el camino compartirán una sesión conjunta al mes en la que realizarán sesiones de técnica de carrera y de natación, sesiones de entrenamientos de las tres disciplinas, aprenderán a trabajar la fuerza, tendrán charlas sobre nutrición, trabajo con pulsómetro, fisioterapeuta, prevención de lesiones, hipopresivos y material de triatlón…, en definitiva, “todo lo necesario para que tengan un bautismo en el triatlón como se merece”. Completarán la preparación física con entrenamientos individuales que realizará cada una por su cuenta.
Pero, ¿es posible prepararse desde cero para afrontar una triatlón en apenas seis meses? “Por supuesto. El triatlón de la mujer tiene distancias cortas y es asequible para las mujeres que empiezan”. En la cita final de junio completarán 300 metros a nado en la concha, 8 kilómetros en bicicleta y 2 kilómetros corriendo. “La prueba es en Donostia porque este es el único «triatlon de la mujer» que tenemos cerquita y además, es ideal para la gente que se inicia”.
Sigue el proyecto en la red
Todos los entrenamientos, los progresos de las chicas y el desarrollo de la iniciativa se podrá seguir a través del blog y las redes sociales. Aitziber confiesa que Internet es una “herramienta poderosa para dar a conocer los proyectos” y a su vez, gracias a la difusión digital se muestra “gratamente sorprendida por la aceptación que está teniendo el proyecto y lo grande que se está haciendo en tan poco tiempo”.
Blog: theirongirlproject.blogspot.com.es
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